miércoles, 16 de noviembre de 2011

Pastoral: ¿Habrá alguien que necesite tus lágrimas?

El texto de hoy nos habla de una serie de deberes o compromisos que como seguidores de Cristo deberíamos cumplir, la invitación es a evaluar nuestras acciones, pensamientos y seguimientos con el fin de confrontar en lo íntimo aquellas áreas en la que Dios debe aún trabajar, para esforzarnos y ser valientes como se nos dice en la Palabra, seguros de ser recompensados en lo público si crecemos y oramos en lo secreto.

Saludos y bendiciones

José Luis

¿Habrá alguien que necesite tus lágrimas? 

Romanos 12:9-15
“El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno. Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros. En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor; gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración; compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad. Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis. Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran.”


En este pasaje, el apóstol Pablo menciona una lista de deberes que todo cristiano debía tratar de cumplir. Nos habla de amarnos unos a los otros con amor fraternal, sin fingimiento. Nos exhorta a ser constantes en la oración, a ser fervientes en espíritu, a servir al Señor, a bendecir a los que nos persiguen; a gozarnos con los que se gozan y a llorar con los que lloran. ¡Qué maravilloso sería que pudiésemos cumplir a cabalidad todos estos deberes! Nuestro testimonio ante el mundo que nos rodea sería verdaderamente impactante y el nombre de nuestro Padre celestial sería glorificado donde quiera que estuviésemos. Lamentablemente nuestra naturaleza carnal nos impulsa a hacer lo contrario, pero debemos hacer el esfuerzo, y con la ayuda del Espíritu Santo lo podemos lograr.

Hay ocasiones en que tenemos la oportunidad de confortar a alguien, ya sea un familiar, o una amistad o un hermano de la iglesia, que está pasando por una situación dolorosa. Por regla general intentamos consolarlo con palabras de aliento, tratando de levantar su ánimo. Sin embargo, el pasaje de hoy dice simplemente: “llorad con los que lloran.” Realmente, en muchos casos, una de las maneras más efectivas en la que podemos ayudar a aquellos que están sufriendo es “llorando con ellos”. Jesús nos dio el ejemplo cuando visitó a María y a Marta después de la muerte de Lázaro. Sintiendo el dolor de ambas hermanas y de los amigos que las acompañaban, el Señor compartió sus lágrimas con ellos. Dice Juan 11:33-36:“Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió, y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Le dijeron: Señor, ven y ve. Jesús lloró. Dijeron entonces los judíos: Mirad cómo le amaba.”

Una pequeña historia nos cuenta acerca de un niño que tenía un gran corazón. Al lado de su casa vivía un señor mayor cuya esposa había muerto hacía poco tiempo. Un día, el anciano lloraba sentado en el portal de su casa. El niño lo vio y se acercó a él, se subió a sus piernas y se quedó allí sentado en silencio por largo rato. Más tarde, su mamá le preguntó qué le había dicho al señor. “Nada – contestó el niño – solamente lo ayudé a llorar.” A veces esto es lo mejor que podemos hacer por aquellos que están pasando por una profunda tristeza. A menudo, nuestros intentos de decir algo sabio y útil causan más bien el efecto contrario. Muchas veces transmitimos mucho más apoyo y comprensión si simplemente les damos un abrazo o nos sentarnos a su lado, los tomamos de la mano y lloramos con ellos. 

Jesús enseñó que son “bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.” (Mateo 5:4). Sé tú un instrumento del Señor consolando a los que lloran, compartiendo tus lágrimas con ellos, mientras en silencio oras pidiendo que la paz de Dios se manifieste en sus corazones.

ORACION:
Padre santo, te ruego pongas compasión y misericordia en mi corazón, para poder ser un instrumento de amor y consolación en tus manos compartiendo mis lágrimas con aquellos que están pasando por un período de dolor y sufrimiento. En el nombre de Jesús te lo pido, Amén.


1 comentario:

  1. La importancia de la crítica a la cristología de san Pablo, radica en que nos aporta los elementos de juicio necesarios para darnos cuenta __de la omisión capital que cometió Pablo al mutilar la naturaleza humana de Cristo en sus epístolas. Desechando la prueba de que es posible alcanzar la trascendencia humana practicando las virtudes opuestas a nuestros defectos hasta adquirir el perfil de humanidad perfecta patente en Cristo (cero defectos). Tesis formulada por filósofos y místicos __y de la urgente necesidad de formular un cristianismo laico enmarcado en la doctrina y la teoría de la trascendencia humana, a fin de afrontar con éxito los retos y amenazas del Islam, el judaísmo, las corrientes de la nueva Era y la modernidad. http://es.scribd.com/doc/73578720/CRITICA-A-LA-CRISTOLOGIA-DE-SAN-PABLO

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